FLORALVEIL nació de una idea simple: explorar el velo no como accesorio, sino como una sensación.
Queríamos crear algo que transmitiera calma y silencio, con una estética sutil que no necesitara decir mucho para sentirse.
Trabajamos con telas traslúcidas y flores dispuestas en equilibrio, como si respiraran despacio.
Todo giraba alrededor de lo que se deja ver parcialmente, de lo que aparece sin mostrarse por completo.
Elegimos tonos nude, ivory y rosa empolvado para mantener una atmósfera suave, íntima y sin exceso.
Más que una producción floral, FLORALVEIL fue una exploración visual y emocional. Un espacio para descubrir cómo los elementos dialogan entre sí cuando no hay prisa por llenar el vacío.
Es un proyecto que habla de belleza contenida, de diseño desde lo esencial y de la intención detrás de cada detalle.